Desde antes del auge del skincare y su vital importancia en el cuidado personal, las mascarillas han sido un básico en cualquier rutina de cuidado y limpieza facial.
Estas han ido evolucionando dejando atrás mezclas pastosas de productos naturales para utilizar “facial sheet mask” que nos proporcionan diversos beneficios de acuerdo a las necesidades de la piel.
En el terreno del cuidado de la piel masculina (diferente a las características de la piel de una mujer) las mascarillas benefician a la cara gracias a sus ingredientes activos que absorben el exceso de grasa, matifican, disminuyen las rojeces e hidratan. Pero no todo es perfecto en esta vida, y las mascarillas tienen una fusión en específico y son escasas las que prometen combatir todos los problemas que se presentan en la piel de la cara.
Ante esto, una de las tendencias favoritas actualmente consiste en usar múltiples mascarillas, al mismo tiempo, para obtener distintos beneficios. Esta tendencia llamada multimasking nació en 2017 con la finalidad de ayudar a conocer los distintos tipos de piel del rostro para poder combatir sus problemas.
01. Piel Mixta
La piel mixta, como su nombre lo indica, posee diferentes zonas con características particulares. Por ejemplo, una Zona T excesivamente grasa y unos pómulos que tienden a resecarse con mucha facilidad. Una combinación de una mascarilla hidratante de fibra de bambú y pepino + una mascarilla de exfoliación puede resultar benéfico para ambas zonas.
02. Piel Seca
La resequedad de una “piel seca” también varía según los puntos del rostro. Aquí, se puede hacer uso de tres mascarillas distintas: una mascarilla de labios + una mascarilla hidratante de ojeras + mascarilla de hidratación profunda.
03. Piel Grasa
La piel grasa destaca por el exceso de sebo natural, lo que hace que esta producción de “brillo” se note en mayor proporción. Sin embargo, esta también es diferente según la parte de la cara. Aquí puede funcionar una dupla de mascarilla detox + mascarilla de hidratación.