El entorno es esencial tanto para Oliver Peoples, con su luminosa herencia del sur de California, como para Brunello Cucinelli, arraigado en Solomeo, Italia.
Para el debut de su segunda colaboración, compuesta por modelos meticulosamente elaborados para la primavera de 2022, el Bradbury Building de Los Ángeles hace más que albergar la campaña, desempeñando un papel central en ella. Desde la Edad de Oro de Hollywood en adelante, esta maravilla arquitectónica ha acumulado créditos cinematográficos y subrayado el influyente poder de las localizaciones en el cine. Ahora, un elenco de personajes ataviados con la colección de gafas de la colaboración es el último en entablar relación con el edificio histórico.
Encargado por un acaudalado heredero en el siglo XIX y construido por el delineante George Wyman en 1893, el exterior de aires renacentistas italianos del Bradbury Building oculta un patio central ornamentado y de lo más sorprendente. Elevándose cinco pisos, su lujoso interior combina mármol italiano prístino y azulejos decorativos con barandillas de hierro forjado y madera pulida. Unas fascinantes escaleras ascienden hasta una claraboya que inunda de luz el espacio. Sin parangón, en cuanto a su particular expresión de grandeza, este hito pasó a engrosar las filas del Registro Nacional de Lugares Históricos en 1971.
Durante casi un siglo, el Bradbury Building ha aparecido en numerosas cintas e influido en el estilo cinematográfico moderno. Jugando con piezas de época, películas que desafían los géneros y favoritos de la cultura pop, los interiores de este icono han adoptado un sinfín de identidades. Un destino que ha dado la bienvenida a personajes arquetípicos que definirían décadas, y que ha sido la pieza central de la innovación técnica y narrativa. A medida que el cine se iba desarrollando, el Bradbury Building iba satisfaciendo sus necesidades.
Además de la excelente reputación cinematográfica del sitio, sus ornamentados interiores de hierro se sienten directamente conectados con Oliver Peoples y Brunello Cucinelli, alineándose con el alambre de filigrana personalizado del primero y el detallado blasón y el uso del horizonte medieval de Solomeo del segundo. Esto enfatiza aún más que es un escenario adecuado para rendir homenaje a la última colección, que presenta cuatro nuevos diseños: Capannelle, Gerardo, Eduardo y Jep.
Cada expresivo modelo de esta colección ha sido fabricado en Italia e incorpora detalles exclusivos de la colaboración. La estética retro de Capannelle hace guiños a las monturas de la Edad de Oro de Hollywood, con una forma de lente cuadrada y la combinación de detalles de acetato y metal en el puente y los aros. Se ofrece con lentes de filtro de luz solar o azul. Elaborado con un frente de acetato delgado y varillas de metal con precisión proporcionada, el sofisticado diseño de Gerardo favorece a todas las formas de cara.
Con una versión moderna de la forma clásica de la lente panthos, Eduardo incorpora una lente profunda y un puente de ojo de cerradura de lo más distintivo. En contraste, las Jep de inspiración vintage hacen gala de un acetato espeso que causa impacto. Ambas opciones también ofrecen un detalle de clip-accesorio a juego. Uno de los modelos destacados de la colaboración inaugural, Filu’, regresa en una iteración de cuerno genuina y de origen sostenible. Jep también ses propone en este material ultra-prémium. Por último, las populares Oliver Sun y su montura de acetato cuadrado atemporal regresan en cinco nuevos colores exclusivos de Brunello Cucinelli.
Una vez más, los colores a lo largo de la colaboración hacen referencia a los elementos naturales que han inspirado durante largo tiempo los lanzamientos de Brunello Cucinelli. Los célebres colores de Oliver Peoples, como LBR y Honey VSB, y el resurgimiento de Canarywood Gradient y Garnet Tortoise, hablan claro. Las gafas en cualquiera de estos colores podrían incorporarse fácilmente a un total look de Brunello Cucinelli.
