La obesidad y el sobrepeso son problemas de salud pública que afectan a millones de personas en México y en el mundo. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018, el 75.2% de los adultos mexicanos tienen sobrepeso u obesidad, así como el 35.6% de los niños y adolescentes. Estas condiciones aumentan el riesgo de padecer enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer, que son las principales causas de muerte en el país.
Ante esta situación, muchas personas buscan soluciones rápidas y efectivas para eliminar la grasa acumulada en su cuerpo y mejorar su apariencia física. Una de las opciones que ha cobrado popularidad en los últimos años es la lipólisis láser, un procedimiento quirúrgico que promete resultados sorprendentes sin las complicaciones de las cirugías tradicionales como el bypass o la lipectomía. Pero, ¿qué tan seguro y recomendable es este tratamiento? ¿Qué riesgos y beneficios tiene? ¿Qué alternativas existen para combatir la obesidad y el sobrepeso de forma saludable? Aquí te lo contamos todo.
01. ¿Qué es la lipólisis láser?
La lipólisis láser es un tipo de liposucción asistida por un láser que pretende tratar, únicamente, los acúmulos grasos localizados. Este es un procedimiento no aconsejable para tratar más de un área del cuerpo. El procedimiento consiste en producir una destrucción de las células grasas a través del efecto térmico del láser.
La historia de la lipólisis láser se remonta a finales del siglo XX, cuando se empezaron a utilizar diferentes tipos de láser para mejorar los resultados de la liposucción convencional. Sin embargo, no fue hasta el año 2006 cuando se introdujo en el mercado el primer dispositivo específico para realizar la lipólisis láser: el Smartlipo.
El Smartlipo es un sistema que utiliza un láser de diodo con una longitud de onda de 1064 nm, que se introduce en el tejido adiposo mediante una cánula muy fina. El láser calienta las células grasas y las rompe, liberando el contenido graso al espacio intersticial. Luego se aspira ese contenido graso con una bomba de vacío y se elimina del cuerpo. El láser también tiene un efecto coagulante sobre los vasos sanguíneos, lo que reduce el sangrado y el riesgo de hematomas. Además, el láser estimula la producción de colágeno y elastina en la piel, lo que mejora la calidad y la firmeza de la piel.
Según sus promotores, la lipólisis láser tiene varias ventajas frente a otros métodos tradicionales como el bypass o la abdominoplastia:
- Es un procedimiento mínimamente invasivo que se realiza con anestesia local y sedación.
- Tiene una duración aproximada de entre 30 minutos a 2 horas, dependiendo del área a tratar y de la cantidad de grasa a eliminar.
- Tiene una recuperación rápida y poco dolorosa. El paciente puede regresar a su casa el mismo día y retomar sus actividades normales en pocos días.
- Tiene un efecto reafirmante sobre la piel, evitando que quede flácida o colgante después de eliminar la grasa.
- Tiene un efecto rejuvenecedor sobre el cuerpo, mejorando la silueta y la apariencia física del paciente.
El Dr. Gabriel Cubillos es uno de los pioneros en el uso de esta técnica en México y en el mundo. Él nos explica cómo surgió la lipólisis láser y cómo funciona:
La lipólisis láser nació como una evolución de una liposucción convencional. La liposucción convencional era muy agresiva para el paciente porque le dejaba muchos hematomas, mucho dolor, mucha inflamación y además le dejaba mucha piel sobrando porque no había una retracción de la piel. Entonces, se empezó a utilizar el láser para mejorar los resultados de la liposucción. El láser tiene dos efectos: uno es que derrite la grasa y el otro es que retrae la piel. Entonces, el paciente queda con una figura espectacular, sin hematomas, sin dolor, sin inflamación y sin piel sobrando.
02. ¿Qué riesgos y complicaciones tiene?
A pesar de que la lipólisis láser se presenta como una alternativa segura y eficaz para eliminar la grasa localizada, no está exenta de riesgos y complicaciones. Algunos de los posibles efectos adversos que pueden presentarse son:
- Infecciones en el sitio de las incisiones o en el tejido subcutáneo.
- Quemaduras o necrosis en la piel o en los órganos internos por el calor del láser.
- Seromas o acumulación de líquido debajo de la piel que requiere drenaje.
- Fibrosis o endurecimiento del tejido subcutáneo que puede causar irregularidades o deformidades en la superficie de la piel.
- Hiperpigmentación o cambios en el color de la piel por la exposición al láser.
- Sensibilidad o entumecimiento en el área tratada que puede durar varios meses.
- Reacciones alérgicas o anafilácticas a los anestésicos o a los medicamentos utilizados durante o después del procedimiento.
- Trombosis venosa profunda o embolia pulmonar por la formación de coágulos de sangre que pueden obstruir las venas o las arterias.
- Insatisfacción con los resultados estéticos por expectativas irreales, asimetrías, irregularidades o falta de definición.
Además, la lipólisis láser no es un tratamiento adecuado para todas las personas. Hay algunas contraindicaciones y condiciones que deben evaluarse antes de someterse al procedimiento, como:
- Tener un índice de masa corporal (IMC) mayor a 30, lo que indica obesidad generalizada y no solo localizada.
- Tener enfermedades crónicas descontroladas como hipertensión, diabetes, enfermedades cardiovasculares, hepáticas o renales.
- Tener anemia, problemas de coagulación o trastornos hemorrágicos.
- Tener infecciones activas o agudas en el cuerpo o en el área a tratar.
- Tener alergias al láser o a los anestésicos utilizados en el procedimiento.
- Tener enfermedades autoinmunes, inmunodeficiencias o estar tomando medicamentos inmunosupresores.
- Tener enfermedades cutáneas, cicatrices queloides, tumores malignos o benignos en el área a tratar.
- Estar embarazada, lactando o tener planes de embarazo a corto plazo.
El Dr. Gabriel Cubillos nos advierte sobre los posibles efectos adversos que pueden presentarse y las contraindicaciones que deben tenerse en cuenta antes de someterse al tratamiento:
La lipólisis láser es un procedimiento muy seguro si se hace con un equipo adecuado y con un cirujano capacitado. Sin embargo, como toda cirugía, tiene sus riesgos y sus complicaciones. Algunas de las complicaciones que pueden presentarse son infecciones, quemaduras, seromas, fibrosis, hiperpigmentación, sensibilidad, trombosis o embolia. Por eso es muy importante hacer una valoración previa del paciente y descartar cualquier contraindicación. No todos los pacientes son candidatos a este tratamiento. Hay pacientes que tienen obesidad generalizada y no localizada, pacientes que tienen enfermedades crónicas descontroladas, pacientes que tienen infecciones activas, pacientes que tienen alergias al láser o a los anestésicos, pacientes que tienen enfermedades autoinmunes o inmunodeficiencias, pacientes que tienen enfermedades cutáneas o tumores en el área a tratar, pacientes que están embarazadas o lactando. Todos estos pacientes no son candidatos a este tratamiento y deben buscar otras opciones.
03. ¿Qué alternativas existen?
La lipólisis láser puede ser una opción para aquellas personas que quieren eliminar pequeñas cantidades de grasa localizada en áreas específicas del cuerpo y que no tienen contraindicaciones para el procedimiento. Sin embargo, no es una solución mágica ni definitiva para combatir la obesidad y el sobrepeso.
La obesidad y el sobrepeso son enfermedades crónico-degenerativas que deben ser tratadas por un médico especialista en nutrición y bariatra, un médico que atiende este tipo de padecimientos que conllevan a otros como la diabetes, hígado graso e hipertensión. El tratamiento debe ser integral e individualizado, considerando las causas y los factores que contribuyen al exceso de peso, como la genética, el metabolismo, las hormonas, las infecciones, el estrés, los hábitos alimenticios y el estilo de vida.
El tratamiento debe incluir una orientación nutricional personalizada que se adapte a las necesidades y preferencias del paciente, una actividad física regular y adecuada a su condición y capacidad, una terapia psicológica que le ayude a mejorar su autoestima y su relación con la comida y su cuerpo, y un seguimiento médico constante que le permita evaluar su progreso y prevenir complicaciones.
En algunos casos, cuando el tratamiento conservador no es suficiente o cuando el paciente tiene un IMC mayor a 40 o mayor a 35 con comorbilidades asociadas, se puede recurrir a la cirugía bariátrica como una opción terapéutica. La cirugía bariátrica consiste en modificar el tracto digestivo para reducir la capacidad del estómago y/o alterar la absorción de nutrientes. Existen diferentes tipos de cirugía bariátrica, como el bypass gástrico, la manga gástrica, el balón intragástrico o el marcapasos gástrico. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, sus riesgos y beneficios, sus indicaciones y contraindicaciones. La cirugía bariátrica debe ser realizada por un cirujano experto en un centro especializado y con el consentimiento informado del paciente. Además, debe acompañarse de un cambio de hábitos alimenticios y de vida para garantizar su éxito y evitar complicaciones.
El Dr. Gabriel Cubillos nos recomienda que antes de optar por la lipólisis láser o cualquier otro método para eliminar la grasa, se consulte con un médico especialista en nutrición y bariatra, que pueda ofrecer un tratamiento integral e individualizado para combatir la obesidad y el sobrepeso de forma saludable:
La lipólisis láser es un tratamiento complementario para eliminar grasa localizada, pero no es la solución para el problema del exceso de peso. El problema del exceso de peso es multifactorial y requiere de un abordaje integral que incluya una alimentación balanceada, una actividad física regular, una terapia psicológica y un seguimiento médico. La lipólisis láser no es para todos los pacientes ni para todas las zonas del cuerpo. Hay pacientes que necesitan una cirugía bariátrica o una abdominoplastia para eliminar el exceso de piel o grasa generalizada. Lo más importante es consultar con un médico especialista que pueda evaluar cada caso y ofrecer la mejor opción para cada paciente.
04. ¿Qué conclusión podemos sacar?
La lipólisis láser puede ser una técnica atractiva para aquellas personas que quieren eliminar grasa localizada sin pasar por una cirugía mayor. Sin embargo, no es un tratamiento milagroso ni definitivo para el problema del exceso de peso. Tiene sus riesgos y complicaciones, sus indicaciones y contraindicaciones, sus ventajas y desventajas. No es para todos los pacientes ni para todas las zonas del cuerpo. Antes de someterse al tratamiento, se debe consultar con un médico especialista que pueda evaluar cada caso y ofrecer la mejor opción para cada paciente.
La obesidad y el sobrepeso son enfermedades crónico-degenerativas que deben ser tratadas de forma integral e individualizada por un médico especialista en nutrición y bariatra. El tratamiento debe incluir una orientación nutricional personalizada, una actividad física regular, una terapia psicológica y un seguimiento médico constante. En algunos casos, se puede recurrir a la cirugía bariátrica como una opción terapéutica. La cirugía bariátrica debe ser realizada por un cirujano experto en un centro especializado y con el consentimiento informado del paciente. Además, debe acompañarse de un cambio de hábitos alimenticios y de vida para garantizar su éxito y evitar complicaciones.
La lipólisis láser no es una solución mágica ni definitiva para el problema del exceso de peso. Es un tratamiento complementario para eliminar grasa localizada, pero no sustituye a una alimentación balanceada, una actividad física regular, una terapia psicológica y un seguimiento médico. Es un tratamiento que debe ser realizado por un cirujano capacitado y con un equipo adecuado. Es un tratamiento que tiene sus riesgos y complicaciones, sus indicaciones y contraindicaciones, sus ventajas y desventajas. Es un tratamiento que debe consultarse con un médico especialista que pueda evaluar cada caso y ofrecer la mejor opción para cada paciente.
