La moda masculina ha experimentado una metamorfosis impresionante en las últimas décadas, evolucionando desde la rigidez de los trajes convencionales hacia un enfoque más experimental y dinámico.
Esta transición no solo refleja un cambio en las tendencias estéticas, sino también en la filosofía de lo que significa vestir con estilo en el siglo XXI. Hoy en día, el hombre moderno busca piezas que no solo destaquen por su diseño, sino que también cuenten una historia, una narrativa que conecte el pasado con el presente y proyecte hacia el futuro. Es en este contexto donde la colección Primavera-Verano 2025 de FENDI emerge como un testimonio de la maestría artesanal y la visión innovadora que define a esta icónica casa de moda italiana.
FENDI, fundada en 1925 por Adele y Edoardo Fendi, ha sido sinónimo de lujo, sofisticación y excelencia en la artesanía. Con el centenario de la firma en el horizonte, Silvia Venturini Fendi, Directora Artística de Accesorios y de las Colecciones de Hombre, ha concebido una colección que celebra esta rica herencia mientras mira hacia un futuro brillante. Esta colección no solo es una oda a los códigos de la casa que han definido la moda masculina desde 1990, sino que también reinventa estos elementos con una frescura y relevancia contemporánea.
La técnica de puntada Selleria, transmitida a la familia Fendi por maestros talabarteros romanos en 1925, es el hilo conductor de la colección. Este método artesanal se despliega en una variedad de formas, desde jacquards de traje a rayas rotas hasta logos FF que se enhebran a través de texturas de lino y felpa. Esta técnica se aplica magistralmente en denim japonés boro y en prendas exteriores de lana nítida y cuero. La atención al detalle es evidente en cada pieza, donde la puntada Selleria se convierte en un elemento tanto funcional como decorativo, elevando la colección a un nivel de artesanía rara vez visto en la moda contemporánea.
La colección se caracteriza por volúmenes sutiles que evocan una nostalgia elegante. Desde chaquetas bomber de tela amplia y abrigos fluidos hasta blazers de tres botones combinados con pantalones cortados sueltos, cada pieza refleja un equilibrio entre la tradición y la modernidad. Los detalles contorneados añaden un toque de originalidad, como las mangas de una camisa de popelina que pueden llevarse largas o cortas, o las tapetas de polo que se retuercen desde la garganta hasta las costillas. Estas innovaciones en el diseño permiten una modularidad aireada que es tanto práctica como estilísticamente impresionante.
La colección de accesorios es un reflejo de la meticulosa atención a los detalles que caracteriza a la marca. Desde el bolso Peekaboo ISeeU Soft y shoppers diagonales flexibles hasta el nuevo bolso cruzado Baguette Double con cremallera, cada pieza es una obra de arte en sí misma. El uso de costuras decorativas en las zapatillas FENDI Force, mocasines con suela de tacos moldeados y zapatos planos con bordado de hilo de cera o cuero patentado resalta la fusión de funcionalidad y estética que define a la colección.
El desfile tuvo lugar en el Open Studio de 7000 m² en Super Studio Maxi en Milán, un espacio que no solo es vasto en tamaño, sino también en su ambición ecológica, siendo el primer espacio de eventos en Europa con certificación LEED Gold®. Diseñado por Nico Vascellari, el set minimalista presentó una serie de columnas de espejo móviles que crearon corredores y reflejos infinitos, un entorno que resonó con la atmósfera etérea de la colección. La banda sonora electrónica personalizada, creada en colaboración con Rocco Rampino, complementó a la perfección el ambiente, añadiendo una dimensión auditiva a la experiencia visual del desfile.
Con una artesanía impecable, un diseño innovador y una presentación espectacular, esta colección redefine lo que significa vestir con elegancia y estilo en el mundo moderno. Es un testimonio de la capacidad de FENDI para honrar su historia mientras sigue avanzando hacia un futuro audaz y brillante.
Todas las imágenes presentadas son cortesía de FENDI.