La Ciudad de México vive un renacimiento gastronómico: los manteles largos ya no bastan, ahora se exige un relato que se sienta en la piel y retumbe en la memoria. Entre luces cinemáticas, aromas a leña y códigos digitales, surge una propuesta capaz de competir con las experiencias multisensoriales de Shanghái o Tokio. Así nace Encanto Fuego & Mar, un santuario donde el fuego es arte, el mar es provocación y la tecnología funciona como hilo narrativo que envuelve cada bocado.
Tokio coronó a Sézanne como el mejor restaurante de Asia en 2024, prueba de que la alta cocina se reinventa a través de la inmersión sensorial y la precisión tecnológica. La CDMX, con su tradición culinaria y su hambre de vanguardia, era el siguiente paso lógico. México cerró 2024 con una proyección de crecimiento de 4 % en la industria restaurantera, impulsada por la demanda de conceptos premium y experiencias de autor, según la CANIRAC. Ese apetito por lo extraordinario prepara el terreno para una apuesta que combine brasas artesanales, storytelling visual y servicio coreografiado al milímetro.
Encanto Fuego & Mar es más que un restaurante: es una mise-en-scène donde la carne madurada y los productos del mar se preparan en un altar de fuego real. Las pantallas de alta definición y la iluminación reactiva transforman el salón mientras los Embajadores de Experiencia guían al comensal a través de capítulos sensoriales que cambian con la temporada.

Aquí, el mesero se convierte en intérprete. Preguntas sobre las maderas utilizadas en la parrilla o la procedencia de los pescados encuentran respuestas que mezclan ciencia, terroir y poesía culinaria. El ritmo sin prisas asegura que cada platillo dialogue con el entorno digital que lo acompaña.
Solo existirá una sede en México y las futuras aperturas serán internacionales. La intención es clara: forjar destino, no franquicia. Reservar con tiempo será un rito, igual que vestir con intención y llegar sin miedo a desconectarse del teléfono para vivir la experiencia en primera persona.

Guía para el visitante intrépido
- Pregunta y explora: los Embajadores llevan el conocimiento tatuado en la memoria.
- Confía en la recomendación: cortes de carne y vinos fueron curados para sorprender.
- Haz espacio para el postre: el clímax visual y gustativo se esconde ahí.
- Registra, pero vive: graba un instante, después suelta el móvil y deja que el fuego hable.
