¿Te gustaría saber más sobre el Jamón Ibérico, ese producto que hace que se te haga agua la boca cada vez que lo ves en una tienda gourmet o en un restaurante de lujo? Pues te tenemos una buena noticia: no solo es delicioso, sino también saludable, sostenible y de una calidad incomparable. Así lo afirma la Asociación del Cerdo Ibérico (ASICI), que nos comparte algunos datos interesantes sobre este manjar ibérico que es embajador de Europa en el mundo.
Pero no te creas todo lo que te dicen, mejor compruébalo por ti mismo. Aquí te dejamos una nota web donde podrás leer con más detalle todo lo que hace al Jamón Ibérico un producto único y excepcional. Te adelantamos algunos puntos clave:
- Un proceso de producción único: El Jamón Ibérico se elabora exclusivamente en la Península Ibérica, con cerdos de raza única que se alimentan y crecen en las mejores dehesas, campos y granjas. Su proceso de elaboración es artesanal y natural, y se basa en el tiempo y el clima para conseguir ese sabor inconfundible. Además, está respaldado por una ley que regula los requisitos y criterios de calidad que debe cumplir el producto.
- Un ecosistema sostenible: El Jamón Ibérico contribuye al mantenimiento de la Dehesa, un ecosistema propio de la Península Ibérica y único en el mundo, donde pastan los cerdos Ibéricos que darán lugar a las producciones de bellota. La Dehesa genera vida, biodiversidad, absorción de CO2, regeneración de la tierra y prevención de incendios. ¿Hay algo más ecológico?
- Un alimento saludable: El Jamón Ibérico no solo es una delicia para el paladar, sino también un alimento beneficioso para la salud. Es rico en proteínas, hierro, zinc, calcio y vitaminas B1, B6 y B12. Además, contiene ácido oleico, el mismo que tiene el aceite de oliva, que ayuda a reducir el colesterol malo y aumentar el bueno. Por eso, se integra perfectamente en la Dieta Mediterránea, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
- Un producto gourmet universal: El Jamón Ibérico es una joya culinaria que se adapta a cualquier cocina y cultura. Su riqueza sensorial, su aroma intenso y persistente, su color rojizo intenso y su textura jugosa lo convierten en un ingrediente ideal para crear platos sofisticados o para disfrutarlo solo o con pan. Además, se puede diferenciar fácilmente del resto de jamones curados gracias a un sistema de precintos de colores que garantizan su autenticidad.