Cuando al diseñador Calvin Klein le preguntaron por la clave de su éxito, su respuesta fue clara y directa: “La única forma de hacer publicidad de algo es no centrarse en el producto”.
Y la fórmula le ha funcionado desde que fundó la marca en 1969 y hasta hoy. Su afirmación puede ser una contradicción en sí misma, pero lo cierto es que lo que Calvin Klein siempre nos ha vendido es poder aspirar a lo que visten los protagonistas de sus campañas. Lo hizo con Mark Wahlberg y Kate Moss, con Brooke Shields, con Freddie Ljungberg y actualmente con iconos de la Generación Z como Justin Bieber, Bella Hadid, Jacob Elordi, Shawn Mendes, Noah Centineo o Lil Nas X, por citar algunos.
De esta forma, la firma estadounidense no solo se convirtió en una de las más importantes del país, sino también en un gran cazatalentos. El último ejemplo es su campaña Calvins or Nothing, para la que ha fichado a Carlos Alcaraz, el tenista más joven en alcanzar el número 1 del mundo.
El deportista español se convirtió en la gran revelación del tenis en 2022, cuando se disparó a lo más alto del ranking ATP, y es sin duda uno de los rostros que mejor encarna el triunfo en los últimos tiempos. Así, continuando con la narrativa visual Calvins or Nothing que Calvin Klein estrenó el pasado otoño con la actriz y cantautora Maya Hawke y el futbolista Romelu Lukaku, ahora ha puesto a Alcaraz en el centro de su campaña de ropa interior, fotografiado por Gray Sorrenti.
El fenómeno deportivo aparece vistiendo las líneas Modern Cotton, Cotton Stretch y Cotton Classic Underwear, así como la nueva colección Calvin Klein 1996 Underwear, que revisita los clásicos de la marca. Y si pensamos en los orígenes de estos calzoncillos americanos, la elección de Alcaraz es una vuelta absoluta a los orígenes de la firma.
Aunque Calvin Klein es ampliamente conocida por su ropa interior, de hecho, es una de sus principales fuentes de ingresos, lo cierto es que mucho antes de la llegada de sus gomas serigrafiadas con el logo, triunfó con otra prenda: sus vaqueros. Apenas 10 años después de abrir sus puertas, en 1969, Calvin Klein ya estaba considerada como una de las principales firmas estadounidenses y sus vaqueros eran un éxito de ventas.