¿Te imaginas un reloj que pueda acompañarte en todas tus aventuras, desde el campo de polo hasta la pista de baile, desde el mar hasta el cielo, desde el pasado hasta el futuro?
Ese reloj existe y se llama Piaget Polo, un reloj que nació en 1979 y que sigue siendo el favorito de los que saben vivir la vida al máximo. Un reloj que combina el deporte, el lujo y el diseño en una joya única e irrepetible. Un reloj que celebra su 150 aniversario con una edición especial que te dejará sin aliento.
01. El origen del Piaget Polo
Piaget era ya una casa relojera de renombre cuando, a finales de los años 70, decidió innovar y crear un reloj que se adaptara al estilo de vida de sus clientes más sofisticados. Unos clientes que no solo querían un reloj de vestir, sino que querían un reloj que les acompañara en todas sus actividades, incluso las más deportivas. Así lo explicó Yves Piaget, el fundador de la marca: “Teníamos que responder a esta demanda particular de nuestros clientes que estaban acostumbrados a tener solo relojes de vestir. Pero ahora nuestros clientes quieren hacer más y más deporte. Eso es parte de la evolución de nuestras vidas hoy. Quieren ser exquisitos, incluso en el deporte. Quieren llevar un reloj mejor, incluso en sus deportes. Así que creamos esta línea deportiva que es impermeable y resistente a los golpes”.
La respuesta a esa demanda fue el Piaget Polo, un reloj que evocaba el deporte de élite por excelencia: el polo. Un deporte que estaba en sintonía con el estatus de Piaget y su Piaget Society, un club exclusivo de personalidades influyentes y amantes del arte de vivir. El Piaget Polo se convirtió así en el reloj de los años 80, una década marcada por el glamour, la sofisticación y la diversión.
02. El diseño del Piaget Polo
El Piaget Polo no fue un reloj más, sino una obra maestra del diseño moderno que concebía el reloj y el brazalete como un todo estético. Y todo en oro. El Piaget Polo se diferenciaba de otros relojes deportivos, la mayoría de acero, por su construcción de eslabones alternados de oro pulido y cepillado que continuaban sin interrupción desde el brazalete hasta la caja y el dial. El resultado era un reloj que se ajustaba a la muñeca como una segunda piel y que parecía esculpido de una sola pieza de oro. El Piaget Polo podía ser impermeable y resistente a los golpes, pero no renunciaba al lujo y la exclusividad en una época en la que Piaget solo trabajaba con metales preciosos. Anunciado como “el reloj deportivo definitivo del mundo”, el Piaget Polo fue tan revolucionario como elegante.
Su perfil en la muñeca estaba garantizado por el dominio de Piaget de los movimientos ultrafinos, tanto mecánicos como de cuarzo. En 1976, Piaget había lanzado el famoso 7P, el movimiento de cuarzo más delgado del mundo en ese momento, que equipaba los primeros ejemplos del Piaget Polo. A principios de los años 80, fue reemplazado por el aún más delgado 8P de 1,95 mm. Pero el célebre calibre mecánico 9P también se utilizó para hacer algunos modelos del Piaget Polo. Tal fue la popularidad del modelo que pronto apareció en una variedad de variaciones: redondo, cuadrado, engastado con gemas, bicolor, solo hora, calendario perpetuo… incluso apareció con correa de cuero.
03. El renacimiento del Piaget Polo
El Piaget Polo 79 vuelve a la expresión más pura del diseño original, aunque con algunas sutiles actualizaciones. De acuerdo con los gustos actuales, el calibre de cuarzo ha sido sustituido por el ultrafino 1200P1, un calibre automático de fabricación propia que se puede admirar a través del fondo de cristal de una caja que se ha ampliado ligeramente a 38 mm.
Por lo demás, es la misma obra maestra ejecutada íntegramente en oro de 18 quilates que deslumbró al jet set hace 45 años y que ya es querida por los entendidos. Hay muchos relojes deportivos elegantes, pero solo el Piaget Polo 79 es un reloj elegante deportivo.
04. ¿Por qué elegir el Piaget Polo?
El Piaget Polo es más que un reloj, es una actitud. Una actitud que combina el alto rendimiento con el alto nivel. Una actitud que no se conforma con lo convencional, sino que busca lo excepcional. Una actitud que no sigue las modas, sino que las crea. El Piaget Polo es el reloj para los que quieren vivir al máximo, sin renunciar al estilo y la distinción. El Piaget Polo es el reloj para los que saben que la vida es un juego, y que hay que jugarlo con clase.