El chef se ha convertido en el nuevo aliado de Longines, una firma con la que comparte la precisión y su amor por la elegancia.
El arte culinario es una de las disciplinas más creativas y precisas que existe, a lo largo de los años ha logrado cautivarnos conectando con nuestros sentidos y regalándonos experiencias sublimes.
La exactitud, precisión y calidad, sin duda, son factores determinantes para que esta magia ocurra. Elementos que Longines ha honrado a través del tiempo en su gran legado dentro del mundo relojero. Longines, en este 2022, comunica un apasionante capítulo de la mano de Franco Noriega, un hombre que representa la esencia de la marca, empresario en ascenso, un reconocido modelo y uno de los chefs más famosos del mundo.
Inspirándonos a través de su talento y compartiendo los valores que la casa relojera desea comunicar, Franco enaltece la importancia de la precisión para las necesidades de un hombre cosmopolita, caminando en sintonía y retando al tiempo a través de las exigencias de un businessman contemporáneo.
Longines, con su distintivo sello de elegancia atemporal, hace frente a estas necesidades: por un lado, con piezas deportivas para un ritmo de vida dinámico y versátil y, por otra parte, con relojes de una funcionalidad e innovación destacables que además revelan diseños exquisitos. Franco, después de haberse mudado a New York para estudiar en la School of Culinary Arts, decide abrir uno de los restaurantes más icónicos del Lower East Side: Baby Brasa.
Este increíble lugar es una fusión de comida peruana (su país natal) acentuada con sabores latinoamericanos. En Brasil, ha creado proyectos como Baby Brasa Sports, que redefine la forma en la que las personas se ejercitan a través del yoga, entrenamientos funcionales y voleibol.
