La semana oficial de la moda en México regresó a la capital con un gran evento de Mercedes-Benz Fashion Week del 25 al 27 de abril del 2022. Con una temática en común “El futuro de la moda”, donde el tema principal era la tecnología aplicada a esta industria y como integrarla para ser realmente sostenible y no ser parte del greenwashing.
01. Francisco Cancino
En las instalaciones de la casa del Lago ubicada en el corazón de la Ciudad de México, MBFWmx inicio con la propuesta del diseñador mexicano Francisco Cancino. El diseñador reunió vestigios que han en su nueva colección “Aves”, la cual está inspirada en el ciclo de vida que estos animales poseen, donde por medio de la migración y el constante movimiento inicia un proceso de reconstrucción y reconocimiento personal, buscando el crecimiento a través del recorrido de diferentes distancias hacia nuevos entornos.
Cancino se reconcilió con su yo del pasado, retomando su lenguaje primario como diseñador, su vena barroca en los bordados de las indumentarias locales de Chiapas y lo fusionó con la sobriedad de los colores blancos y beiges, que llena cada hilo y urdimbre de un espíritu casi eclesiástico que lo ha caracterizado durante ya varios años.
El retomar aspiraciones de su pasado y fusionarlas con su presente es algo que antes habíamos visto en el look and feel de la marca. Sin embargo, su diseño plantea una búsqueda identitaria trascendental de lo que constituye a todos los que vivimos en nuestro bello México y lo reconceptualiza en el mundo contemporáneo. Estampados tartanes, bodys de encaje con aires Y2K y pantalones de lino con colores llamativos como el rojo, el naranja, el rosa y el amarillo fueron el principal ícono visual de esta colección.
Una colección que surge del redescubrimiento, que retrata las visiones sobre la moda no es algo nuevo en la industria. Esperamos que en la siguiente edición, Francisco a través del tiempo, se deje llevar y fluir, encontrándose en un nuevo hogar tal cual lo describe en su inspiración de la colección.
02. Julia y Renata
Desde 1993, Julia y Renata han estado al frente de su propia línea. Su filosofía está basada en el profundo estudio del cuerpo, en la transformación y la experimentación. Con Talpa, su más reciente colección, toman como punto de partida leyendas sobre sus antepasados familiares que vivieron entre Ameca y Talpa de Allende, Jalisco.
Las diseñadoras trabajaron con lino, algodón y algunos materiales transparentes, todos en colores neutros: blanco, negro y un tono grisáceo, y todo en solo dos formas geométricas: el cuadrado y el círculo. Comenzaron con un conjunto de dos piezas, ligeramente oversize y rematado con un gorro de ganchillo. Luego, una abundancia de piezas finamente drapeadas que resaltaron su excepcional atención al detalle. Uno puede pensar que es imposible lograr un hermoso drapeado en lino; pero Julia y Renata demostraron todo lo contrario con inesperados cortes en vestidos y camisas largas. Algunas piezas eran completamente escultóricas, otras parecían provenir directamente de las escaramuzas, esto último se realizó a través de una colaboración entre las hermanas y Belrio.
Se puede entender que también es un regreso a sus propias raíces; ya que sus familiares vivían en dos pequeños pueblos del estado de Jalisco que marcan el inicio y el final de la famosa peregrinación a la Virgen del Rosario, importante tradición en dicho estado.
03. Sandra Weil
A menudo, la diseñadora se inspira en la naturaleza. Para esta temporada de otoño de 2022, miró un árbol, el Pseudobombax, que explota en pequeñas flores de color rosa brillante cuando florece. Desde que se lanzó por primera vez en 2012, la marca de ropa femenina de lujo Sandra Weil se estableció rápidamente como un jugador importante en el mapa creativo de México y América Latina.
Los populares bustiers y vestidos de fiesta de Weil aparecieron, pero fue en su exploración de la sastrería donde las cosas se pusieron interesantes. Los detalles trenzados enriquecieron lo que podría haber sido una blusa básica, los pliegues agregaron interés a un blazer deconstruido y los pantalones presentaban cortes únicos en la cintura. En vívidos tonos de satén y tafetán, eran una metáfora visual del big bang que eventualmente da paso al florecimiento de la tierra. El brillo fue el hilo conductor de la colección, presente incluso en los accesorios tejidos con alpaca peruana, incluidos los guantes y las medias que acompañaron casi todos los looks.
Con esta colección, Weil concluyó una trilogía de autoexpresión; está claro que ella ha florecido. Espero que se mantenga en ese estatus de diseño y no caiga en la exploración inter dimensional que gran parte de los diseñadores mexicanos realizan cuando se sienten en su época dorada del diseño.
04. Kris Goyri
La feminidad jugó un papel importante en todo momento en esta edición. Pareciera que Goyri tomó prestadas algunas siluetas de Kansai Yamamoto y las adaptó a su lenguaje de diseño. Es probable que un choque entre el idealismo vanguardista de la generación japonesa de los años 70 y el romanticismo que suele favorecer a Goyri resuene en las mujeres camaleónicas de hoy.
Nacido en la Ciudad de México, Kris comenzó su pasión por la moda desde muy pequeño motivado por el arte, la ilustración y el color. Graduado en el 2007 del Instituto de Estudios Superiores de Moda Casa de Francia en la Ciudad de México, donde obtuvo las principales bases de diseño, desarrollando un estilo único y encantador que le permitió comenzar a trabajar dentro de la industria creando líneas de ropa femenina ready to wear donde se empapó de conocimiento para visualizar, plasmar y expresar su personalidad en cada uno de sus diseños. Es ahí donde el lenguaje de diseño de Goyri se transformaría a algo más que simples patrones.
En esta colección, se inspiró en formas orgánicas; desde su simpleza, siluetas y conceptos. Interviniendo el mundo de los hongos: el reino fungí, quien crea morfologías cautivadoras y al mismo tiempo poco comunes.
Volúmenes, siluetas y texturas, así como la paleta de color que abstrae del mundo microscópico que seducen al espectador de este universo natural; generando una gama de amarillos, verdes, azules, rosas, blancos, grises que producen una experiencia de contrastes y armonías a lo largo de la colección, logró resaltar de esta manera el material distintivo de Kris Goyri: la seda.
Cuando el último look se apoderó de la pasarela, un mono verde con sutiles toques de plumas y un abrigo con bloques de color exquisitamente confeccionado, un sentimiento de emoción alcanzó su punto máximo. Para el final, las modelos mostraron sus movimientos de baile, nuevamente como la temporada pasada, para mantener viva la energía.