De geeks a trendsetters: cómo las marcas de moda están aprovechando el poder de la cultura

La moda y el fandom pueden parecer mundos aparte, pero en realidad tienen mucho en común. Ambos son formas de expresar nuestra identidad, nuestros gustos y nuestras pasiones. Ambos son espacios creativos donde podemos explorar nuevas ideas, estilos y narrativas. Y ambos son comunidades donde podemos encontrar personas con intereses similares, compartir experiencias y formar vínculos.

En esta era donde los fandoms dominan las conversaciones globales, las marcas inteligentes están reconociendo y capitalizando la innegable influencia de la cultura geek en el mercado principal. Ya sea a través de colaboraciones, colecciones o campañas, las marcas de moda están encontrando formas de conectar con los fans de los videojuegos, los cómics, el anime y otros medios de entretenimiento que alguna vez se consideraron “nerds”.

Paris Hilton como «Sailor Moon» – Fuente: Celebmafia
01. Colaboraciones poderosas

La principal forma en que hemos visto a las marcas de moda apoyarse en esta tendencia cultural es a través de la vía probada y en su mayoría verdadera de las colaboraciones.

Recientemente, Kith se asoció con Marvel para una cápsula en celebración del 6 aniversario de X-Men. Yendo más allá de los estampados y logotipos típicos de una colaboración de streetwear (los diseños hicieron un excelente uso de imágenes icónicas de cómics), la cápsula también se inclinó significativamente hacia la cultura con tarjetas coleccionables especiales, un cómic colaborativo, un gabinete de juegos de arcade personalizado y una aparición en San Diego Comic Con.

Por otra parte, vimos a Jimmy Choo asociarse con el icónico anime Sailor Moon en una serie de botas inspiradas en los heroicos protagonistas del programa, mientras que la inolvidable colaboración de varias partes de Loewe con Studio Ghibli sigue estableciendo el estándar de la industria sobre cómo dar vida al material fuente de un colaborador a través de la artesanía y el diseño. En el ámbito de los videojuegos, hemos visto a Burberry y Lacoste asociarse con el infinitamente popular Minecraft en cápsulas de ropa que se podían usar tanto en el juego como en IRL. Nike lanzó una zapatilla en colaboración con el equipo profesional FaZe clan, mientras que Balenciaga diseñó skins en el juego para Fortnite.

Pero es quizás Nicolas Ghesquière de Louis Vuitton quien ha estado más adelantado en este frente. Ya en 2015, el director creativo tenía a Lightning, el protagonista del videojuego Final Fantasy XIII, como la cara de su colección de primavera de 2016, apareciendo en numerosas campañas publicitarias importantes.

Estas colaboraciones no solo benefician a las marcas de moda, sino también a las franquicias de entretenimiento. Al asociarse con marcas de moda de renombre, pueden aumentar su prestigio, su visibilidad y su relevancia cultural. También pueden crear una mayor lealtad y compromiso entre sus fans, al ofrecerles nuevas formas de expresar su afición.

02. Llamamiento a la juventud – en cifras

Las colaboraciones son una forma efectiva de llegar a los consumidores jóvenes y entusiastas que conforman una gran parte del mercado potencial para las marcas de moda. Los pasatiempos de entretenimiento y medios que alguna vez se consideraron “nerds” (jugar videojuegos, leer cómics, ver anime) ahora están en todas partes. O los geeks ya no existen, o todo el mundo se ha convertido en un geek. Si bien el crecimiento de estos campos es notable en todas partes, este aumento es especialmente evidente entre los jóvenes.

La Asociación de Software de Entretenimiento informó en 2021 que aproximadamente el 76% de los estadounidenses menores de 18 años y el 67% de los adultos juegan videojuegos de forma regular de alguna forma, ya sea en teléfonos inteligentes, PC o consolas. Esos números solo han crecido en los últimos años.

Estas estadísticas, por supuesto, se cruzan con las del poder adquisitivo y las previsiones económicas de los Zoomers de las que siempre estamos escuchando. La Generación Z consta de aproximadamente 2.56 millones de personas en todo el mundo, y para 2030, el 30% de la fuerza laboral mundial será la Generación Z. En 2022, Business Insider estimó su poder adquisitivo en más de $360 mil millones en ingresos disponibles.

03. Futurismo retro

Si bien su presencia cultural y mediática podría estar en aumento, la ciencia ficción y la fantasía no son categorías completamente nuevas para la moda. Los diseñadores de moda ciertamente podrían considerarse un tipo de nerd, y las semillas de las exploraciones superpoderosas de hoy se han plantado durante mucho tiempo.

Los diseños del gran Thierry Mugler no solo tomaron el lenguaje visual teatral de la ciencia ficción y la fantasía, sino que lo hicieron por preocupación por los temas humanos que cosas como los cómics y el anime exploran en una escala casi mítica: heroísmo, romance, poder, violencia, tragedia, transformación. Encontrando belleza y fuerza en lo extravagante e imaginativo, Mugler inspiró a las personas, y especialmente a las mujeres, a atreverse a soñar y exigir un futuro diferente. En su reciente renacimiento, Courrèges se ha inspirado mucho en las visiones pioneras de la era espacial de su fundador homónimo.

La elogiada permanencia de Alessandro Michele en Gucci fue un jugador muy influyente en el alejamiento de la moda de la ropa deportiva estampada y con logotipos y llegó a definir la estética “geek chic” de la década de 2010, una tendencia que surgió junto con el aumento de la popularidad de los juegos, el anime y las películas de superhéroes, que luego se aceleró enormemente por la pandemia de Covid. En muchos sentidos, la introspección y el tiempo que nos impuso la pandemia crearon una comprensión colectiva de que apasionarse por un tema de nicho es divertido y gratificante.

Fuente: Vogue
Fuente: Vogue
Fuente: Vogue
Kith Pop-Up at San Diego Comic Con – Fuente: Culture Trip
04. Conclusión

La moda y el fandom son dos formas poderosas de contar historias, crear mundos y construir comunidades. Al unir estos mundos, las marcas inteligentes pueden producir experiencias únicas, significativas y memorables para sus consumidores. Y al hacerlo, pueden demostrar que la moda no es solo una cuestión de apariencia, sino también una forma de expresión, diversión y pertenencia.

Jimmy Choo x Sailor Moon
Fuente: Jimmy Choo

La moda tiene una actitud de “no puedes sentarte con nosotros”, pero ¿es ese realmente el caso? Puede ser difícil acercarse a un aficionado a la moda electrizantemente vestido en la calle, pero pregúnteles sobre su apariencia y rápidamente comenzarán a nerd sobre su vestuario de archivo. Su vestuario de archivo y sus diseñadores favoritos. Y, de hecho, por mucho que la moda se trate de verse bien, está tan ligada a la vulnerabilidad y la autoexpresión, actitudes que asociaríamos más con el campamento de teatro que con las porristas. Si bien la moda aún conserva su aura de exclusividad, estamos empezando a ver un cambio cultural que la reconoce como la fuerza democrática, expresiva e intelectual que puede ser.

Mientras tanto, una vez que los intereses “nerds” que durante mucho tiempo fueron relegados a los márgenes de la cultura de consumo, se han arraigado directamente en la corriente principal: hay una nueva película de superhéroes cada dos semanas, todos y su madre juegan videojuegos, los niños de todo el mundo están obsesionados con el anime, las ventas de cómics han aumentado en la última década.

Fuente: Wonderland

Estos intereses no son solo pasatiempos inocuos, sino que también son formas de construir identidades, comunidades y movimientos sociales. Los fandoms son espacios donde las personas pueden encontrar sentido, apoyo y pertenencia, especialmente en tiempos difíciles. Los fandoms también son espacios donde las personas pueden desafiar las normas sociales, cuestionar las estructuras de poder y crear nuevas formas de representación y expresión. Los fandoms son espacios donde las personas pueden ser ellas mismas, o incluso alguien más.

Doraemon x Gucci – Fuente: Timeout

La moda, como forma de arte y comunicación, tiene el potencial de capturar y celebrar esta diversidad y creatividad de los fandoms. Al hacerlo, puede originar puentes entre diferentes culturas, generaciones y grupos sociales. La moda puede ser una forma de honrar a los creadores y las obras que nos inspiran, así como una forma de compartir nuestra pasión con otros.

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