¿Te gustaría conocer Oaxaca de otra manera, a la mexicana? Si eres de los que prefieren vivir experiencias auténticas y locales, y no seguir las rutas turísticas convencionales, entonces Otro Oaxaca es el hotel que estabas buscando.
Otro Oaxaca es el nuevo proyecto del Grupo Habita, una cadena de hoteles boutique que se caracteriza por su diseño innovador y su compromiso con la cultura y el medio ambiente. El hotel abrirá sus puertas en agosto, y promete sumergir a los viajeros en Oaxaca a través de otra lente, una que es innegable y auténticamente local.
Situado frente a la iglesia de Santo Domingo de Guzmán y su plaza peatonal, el hotel parece discreto desde la calle. Pero tras su fachada histórica se esconde un complejo contemporáneo que prolonga la vitalidad de la plaza pública a través de una serie de pintorescos patios, una animada terraza en la azotea y espacios culturales. Estas zonas animan a los visitantes y a los lugareños a pasar el rato y mezclarse, mientras que las habitaciones y el spa subterráneo ofrecen un retiro sereno.
“Todo en el hotel es 100% local: el equipo, los materiales, toda la producción. Está pensado para que viajeros y lugareños disfruten por igual”, afirma João Batalha, director general de Otro Oaxaca.
Los interiores, diseñados por Carlos Couturier, muestran la artesanía de la región. Todo, desde los muebles hasta la ropa de cama, ha sido diseñado específicamente para Otro Oaxaca y fabricado a mano por artesanos locales con materiales de la región, creando un ambiente utilitario pero sofisticado.
La vitalidad que se respira en los espacios comunes se yuxtapone en los 16 alojamientos, donde se crea una sensación de serenidad a través de una elegante sencillez. Mesas de madera elaboradas por carpinteros locales aparecen junto a suaves edredones, cortinas de piel y piezas de barro con textura hechas a mano en talleres oaxaqueños. Una serie de suites de varios pisos, a las que se accede a través de un tranquilo patio, con sus propias piscinas y terrazas, ofrecen la oportunidad de relajarse a la manera oaxaqueña.
Otro Oaxaca no es solo un hotel, sino una invitación a explorar Oaxaca desde dentro. Ya sea descendiendo al spa subterráneo, compartiendo comidas en la terraza de la azotea, relajándose en una suite de varios pisos o descubriendo el laberinto de calles que hay más allá, se trata de ir más despacio y dejarse llevar, abrazar lo desconocido y ver Oaxaca “de otra” manera.
Para una sensación de tranquilidad aún mayor, el spa Otro Mundo -uno de los pocos de la ciudad- invita a los huéspedes a descender a “otro mundo”. Bajando por escalones escalonados, el sol del luminoso patio se desvanece lentamente para revelar una oscuridad tranquilizadora. Aquí aguarda una impresionante piscina subterránea que recuerda a un cenote, acompañada de una sala de vapor, un baño de hielo y dos salas privadas para tratamientos, todo ello inspirado en la sabiduría ancestral.
Otros espacios de acceso público, como la terraza de la azotea, el restaurante de la planta baja y un espacio de reunión denominado El Búnker, reúnen a lugareños y viajeros en torno a comidas compartidas e intercambios culturales. Dada la notoriedad de la cocina oaxaqueña, el menú del restaurante del chef Saúl Carranza sorprenderá a los comensales de la mejor manera posible.
Con menos énfasis en la tradición y más enfoque en el sabor, la frescura y las texturas inesperadas, sus platos de autor, todos creados con ingredientes locales, se pueden degustar en el patio de la planta baja, así como en la gran mesa comunal de la azotea, donde Saúl y su equipo cocinan en una parrilla abierta. El Búnker, situado junto al patio principal del hotel, ofrece el ambiente perfecto para trabajar y ponerse al día, pero el espacio también acogerá proyecciones, actuaciones y otras reuniones sociales, reforzando los lazos de Otro Oaxaca con la comunidad local.
