En el vasto paisaje de destilados nacionales, surge Nocheluna como un faro rebelde, desafiando las expectativas y explorando los rincones inexplorados de la destilación.
A través de una conversación exclusiva con el maestro destilador Ricardo Pico, creador de Nocheluna, nos aventuramos en las raíces, la producción y el fascinante futuro de esta joya líquida nacida en el corazón del desierto chihuahuense.
01. El Origen: Sotol, el espíritu del desierto
Cuando se piensa en destilados nacionales, el agave o el maguey suelen robar el protagonismo. Sin embargo, en el norte de México, el sotol, con su ADN único, desafía la norma. A través de los ojos y palabras de Ricardo Pico, nos sumergimos en la esencia del sotol, una planta con veintidós variedades que se extiende desde el sur de los Estados Unidos hasta Oaxaca. En Chihuahua, Nocheluna selecciona con maestría dos variedades: una del bosque y otra del implacable desierto.
Las comunidades originarias de América han destilado el sotol durante más de diez mil años, pero fue con la llegada de los españoles que la destilación comenzó a escribir su historia. Momentos de persecución, prohibiciones y desafíos se entrelazan con la evolución de esta bebida única.
Desde la prohibición de Pancho Villa hasta las tensiones con el gobierno estadounidense, el sotol ha resistido y evolucionado, llevando consigo la narrativa de una tradición inquebrantable.
02. Producción tradicional: arte y pasión en cada sorbo
El proceso de producción del sotol es una obra maestra en sí misma. A diferencia del agave, la planta del sotol se asemeja a una alcachofa, fibrosa y desprendiéndose por capas. A través de las tradicionales destilaciones, donde la fermentación subterránea y la destilación en alambiques de cobre dan vida al líquido, Ricardo Pico nos sumerge en un mundo donde el arte y la pasión se destilan en cada sorbo.
Nocheluna no es solo una bebida; es un viaje sensorial que fusiona el pasado y el presente. Desde la llegada de Iván Saldaña de Casa Lumbre hasta la colaboración con el visionario musical Lenny Kravitz, la marca ha evolucionado sin perder su conexión con las raíces. Cambios en los procesos, como el uso de tinas redondas a nivel de piso y el reemplazo de la molienda con hacha por desgarradoras de agave, demuestran un compromiso con la excelencia y la sostenibilidad.
03. Nocheluna: El desierto de Chihuahua en cada gota
La historia de Nocheluna es un viaje de cinco años, desde la colaboración con Don Lalo Arrieta hasta la incorporación de Lenny Kravitz como Director Creativo.
Inspirado por un famoso corrido regional, “Lindas las noches de luna, alegradas con sotol”, Nocheluna captura el espíritu del desierto de Chihuahua en cada botella. Con notas minerales, herbales y un toque medio de menta, es un destilado suave, amable y pensado para ser disfrutado en cualquier rincón del mundo.
Ricardo Pico vislumbra un futuro donde Nocheluna no solo destila sotol, sino que cultiva la tierra. Con un enfoque en el crecimiento sostenible, la marca busca preservar la tradición sotolera y contribuir al desarrollo de comunidades locales. Nocheluna, más que un sotol, es la encarnación de una cultura, un viaje por el desierto chihuahuense embotellado para el mundo.
04. Sumérgete en el espíritu rebelde de Nocheluna
En resumen, Nocheluna no es simplemente una bebida; es una narrativa rica en historia, tradición y pasión. Desde la esencia del sotol hasta el arte de su destilación, cada detalle se entrelaza para crear una experiencia que va más allá de lo líquido. Prepara tu paladar para un viaje al desierto chihuahuense con Nocheluna, donde la historia y el sabor convergen en cada sorbo.
